Instalación compleja en la costa del Báltico

Se instalaron cristales de fachada de dos toneladas (4409 libras) de la empresa austriaca Egger Glas en un nuevo edificio en la capital de Estonia, Tallin. Para ello se utilizó el sistema de ventosas de vacío VSG 2500 KMH de Heavydrive. El sistema tiene una capacidad de carga de 2500 kilos (5512 libras) y una envergadura de cinco metros (16,4 pies), lo que lo convertía en la opción perfecta para manipular los paneles de vidrio de siete metros (23 pies) de longitud y 2,9 metros (9,5 pies) de altura.

Con el fin de garantizar que el proyecto de construcción se desarrollara sin problemas, el cliente hizo uso del servicio especial de Heavydrive: un instalador de Tallin viajó excepcionalmente a la sede de Heavydrive en Tapfheim, donde recibió una formación intensiva acerca del funcionamiento del sistema.

Sin embargo, debido a varios retrasos, el proyecto no pudo comenzar en verano, como estaba previsto, sino que se demoró hasta finales de octubre de 2022. En esta época del año, son frecuentes las tormentas violentas en la costa de Estonia, lo que suele hacer imposible el acristalamiento con elementos de vidrio tan pesados. Por este motivo, era necesario determinar con exactitud los datos meteorológicos antes de proceder al montaje.

Por otro lado, la logística del proyecto supuso un desafío adicional. Debido a la situación de guerra, la mayoría de las conexiones de transporte a Estonia se habían paralizado. Encontrar una compañía de transporte era tarea difícil, mientras los precios continuaban subiendo. Además, los paneles de vidrio se enviaron desde Austria, lo que requirió una coordinación precisa de la entrega. Gracias a su extensa experiencia en proyectos de construcción internacionales, los amplios conocimientos de su equipo y su sofisticado sistema logístico, Heavydrive logró llevar a cabo esta proeza logística. Tanto el sistema de ventosas de vacío como los elementos de fachada llegaron sanos y salvos a su destino y la instalación se desarrolló sin problemas. Tras dos días de uso, el sistema de ventosas de vacío se envió de regreso a Alemania y llegó al almacén principal de Tapfheim en 48 horas.